Enoc y Elías

¿Qué de Enoc y  Elías?
02-04-12

Es muy común escuchar a más de algún fanático lector bíblico referirse al tema llevado y traído en relación a estos dos hombres que aparecen en Las Sagradas Escrituras, hay puntos de vista bíblicos que se tomaran como evidentes ejemplos para determinar  si Enoc y Elías  están con Dios en el cielo. En Primer lugar determinaremos el espacio “cielo” este lugar no es un simple cielo, en donde vuelan las aves; “Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen Sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos”. Génesis 1:20 el punto en consideración es determinar si estas aves permanentemente están en el cielo, dicho de otra manera ¿todo lo que las aves hacen esta en el cielo?, ¡por supuesto que no!, comen y se alimentan bajando a tierra, es entonces este primer espacio el cielo en donde las aves pueden volar, ahora bien  hay lugares en los cuales las aves no podrán acceder, es a saber.

Científicamente a través de  telescopios  el hombre puede alcanzar  ver  espacio que no es visible a simple vista, por supuesto, el Creador dio la sabiduría necesaria al hombre; Job nos dice: ^“ He aquí que ni aun la misma luna será resplandeciente, Ni las estrellas son limpias delante de sus ojos”, Job 25:5; claramente la intensión de Job no es desmerecer la creación  referente a los astros en el firmamento, creo firmemente que aquellas cosas que el hombre puede ver a simple vista o con potentes  objetos, por esa simple razón,  son ya contaminados por el pecado del hombre y no pueden estar  en la presencia del Padre Todopoderoso, es de acordarnos que quien escribe el libro de Job; quien fuese con certeza, fue un hombre inspirado por Dios y así como lo reconoció el Profeta Isaías el haber escrito cosas que no entendía, para el Señor es su verdad.

La majestuosidad y  gloria del padre es impenetrable; Él es pureza y todo lo que es pecado frente a Él se autodestruiría; Pablo confirma el estado del Todopoderoso; “el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver, al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén”. 1 Timoteo 6:16. Pablo hace referencia al mismo Padre y al decir en luz inaccesible es lógico pensar que el pecado no puede estar al lado del Altísimo, El ojo humano no podrá jamás ver el lugar donde  está el Trono de Dios, el deseo permanente del hombre es estar en desacuerdo  con lo que Dios demanda, el ejemplo primario lo vemos con el pecado Adán y Eva, quisieron ser dioses y más tarde el suceso de la torre de Babel.

Como miembros de la Iglesia no nos mueve el mero hecho de la discusión y las pleitesías al tratar temas como el que se está planteando, de muchas maneras el Señor nos ilumina para presentar  desde diversos puntos  bíblicos temas tan llevados y traídos como métodos de evangelización falsos influenciados satánicamente.

Empezando con el análisis bíblico referente al hombre iremos al origen;  “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”. Génesis 1:26 – 27; en la cronología de la creación al llegar el sexto día, aparece el hombre en escena, Lo verdaderamente  grandioso es lo que aparece escrito en Génesis 2:7 “Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente”, el maravilloso material del cual fue hecho el hombre es la misma tierra, característica de todo lo que  hay en el planeta, incluidos Enoc y Elías; El Apóstol Pablo les escribe a los Corintios; “Y hay cuerpos celestiales, y cuerpos terrenales; pero una es la gloria de los celestiales, y otra la de los terrenales”.  1 Corintios 15:40, la biblia jamás registra que estos dos personajes escogidos por Dios, se encuentren a la diestra del Padre, esa es una simple teoría humana que no tiene respaldo; Pablo está haciendo la distinción entre dos tipos de creación, una que habita en la tierra y otra en sitios celestiales, es a saber.

Set, simiente antigua de seres temerosos de Dios, Noé; justo a los ojos Jehová, Abraham, Isaac, Jacob y hasta el mismo Moisés, David hombre conforme al corazón de Jehová, hombres que se esforzaron y cumplieron con la voz del Todopoderoso, registra la biblia que murieron y fueron enterrados y cumplieron la ley sentencia inevitable “del polvo eres y al polvo retornaras”

Enoc;“Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios”. Génesis 5:24,  Al leer este pasaje la biblia no dice expresamente que Dios llevo a Enoc a su trono de gloria, esa parte es la que muchas personas le agregan al pasaje en mención, quizá el texto no es abundante en explicar, mas sin embargo en el nuevo testamento aparece  este mismo hecho relacionándolo de una manera más ilustrativa; “Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios”. Hebreos 11:5, el argumento “para no ver muerte” significa que era proclive a ella, en otras palabras no era el momento de morir para este hombre de Dios, este pasaje habla de trasponer;  cambiar de lugar  y de igual manera no aparece su destino final, mucho menos “al cielo” es de suponer que este hombre nació, creció y se desenvolvió tal cual como  cualesquier hombre y en él se cumplió la ley de vivir y morir, y no es de asustarse Jesús paso por ese mismo proceso al hacerse hombre.

De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares, para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él. Estos son murmuradores, querellosos, que andan según sus propios deseos, cuya boca habla cosas infladas, adulando a las personas para sacar provecho”. Judas 14, Pareciese que este pasaje bíblico referente a Enoc fue escrito a propósito para todos aquellos aduladores de cosas que no son ciertas; para mas él mismo (Enoc) los profetizó.

Un evento exactamente igual es el que nos relata la siguiente porción bíblica; “Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea. Hechos 8:39-40, si el eunuco o etíope fuese el escritor de este pasaje lo demás hubiese quedado en el limbo.

Elías; “Y aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos; y Elías subió al cielo en un torbellino. Viéndolo Eliseo, clamaba: ¡Padre mío, padre mío, carro de Israel y su gente de a caballo! Y nunca más le vio; y tomando sus vestidos, los rompió en dos partes. Alzó luego el manto de Elías que se le había caído, y volvió, y se paró a la orilla del Jordán”.2 Reyes 2:11-13, en esta oportunidad aparece un lugar “el cielo” no es de dudar que fue alzado al cielo y el elemento que ayuda a entender este suceso es el medio por el cual paso este evento; un torbellino, al igual que lo sucedido a Enoc, si creyésemos que Elías está en la presencia de Dios Padre, es solamente un suponer; un poco más tarde en el tiempo aparece lo siguiente; “Y le llegó una carta del profeta Elías, que decía: Jehová el Dios de David tu padre ha dicho así: Por cuanto no has andado en los caminos de Josafat tu padre, ni en los caminos de Asa rey de Judá, sino que has andado en el camino de los reyes de Israel, y has hecho que fornicase Judá y los moradores de Jerusalén, como fornicó la casa de Acab; y además has dado muerte a tus hermanos, a la familia de tu padre, los cuales eran mejores que tú; he aquí Jehová herirá a tu pueblo de una gran plaga, y a tus hijos y a tus mujeres, y a todo cuanto tienes; y a ti con muchas enfermedades, con enfermedad de tus intestinos, hasta que se te salgan a causa de tu persistente enfermedad”. 2 Crónicas 21:12-15; el hecho de exponer este suceso en crónicas podríamos tomarlo o no como sustentante de que Elías aparece en otro lugar tiempo después del azoto, la realidad del caso especifico de Elías es que era de nuestras mismas actuaciones; “Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto”. Santiago 5:17-18, no es el hecho de desmerecer el temor que de Dios tenia Elías, lo interesante  es saber que  este profeta de Dios era semejante a los apóstoles;  ni más ni menos, que el resto de los hombres utilizados por el Creador en su trabajo, cabe notar que quienes escribieron el nuevo testamento se basaban a documentos en royo y no se dejaban sorprender por doctrinas inventadas para desviar la salvación de quienes la buscaban.

Todo el que de Dios busca sabiduría, no debería dejarse sorprender por fabulas producto de ocurrencias, para provocar comparaciones, de lo que posiblemente pueda suceder en su vida espiritual, Satanás ataca en este tiempo nuestra parte espiritual agradándonos al oído temas como este para desviar  la atención del verdadero evangelio de, Jesús pronuncio; “Nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo; el Hijo del Hombre, que está en el cielo” Juan 3:13, si esta afirmación del Salvador suyo y nuestro la desmerecemos, hacemos mentiroso a quien dio la vida en rescate de las nuestras, además “pero una es la gloria de los cuerpos celestiales, y otra la de los cuerpos  terrenales” Lo reconoció el sabio Salomón; “Porque lo que sucede a los hijos de los hombres, y lo que sucede a las bestias, un mismo suceso es: como mueren los unos, así mueren los otros, y una misma respiración tienen todos; ni tiene más el hombre que la bestia; porque todo es vanidad. Todo va a un mismo lugar; todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo. ¿Quién sabe que el espíritu de los hijos de los hombres sube arriba, y que el espíritu del animal desciende abajo a la tierra?”Eclesiastés 3:19-21, ni el cuerpo vivo ni mucho menos el espíritu (soplo de vida) va al cielo, de otra manera para qué nos hizo Dios en la tierra y la sentencia se confirma con este ultimo escrito bíblico; “Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio, así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan”. Heb 9:27-28; Enoc y Elías descansan, duermen en el Señor en algún lugar donde pernoctaron y luego murieron y resucitaran en la segunda venida de Cristo, Promesa para ellos y para nosotros; y solamente existen dos opciones para los mortales; “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.  Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. 1 Ts 4:16-17 y  aun ya  resucitados o transformados estaremos para siempre en la tierra porque la facultad de ser hombres no se extingue,  ni aun después de tener cuerpos glorificados  Dios  a ofrecido el cielo como morada de los santos, para eso vendrá Él con las moradas celestiales mismísimamente a este planeta tierra. “Porque los benditos de Él heredaran la tierra” Salmos 37:22ª y; “No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación”. Juan 5:28-29. Bíblicamente no aparece nada extraordinario sobre Enoc y Elías;  Juan 8:21 “Otra vez les dijo Jesús: Yo me voy, y me buscaréis, pero en vuestro pecado moriréis; a donde yo voy, vosotros no podéis venir”. ¡Cuánto amaba Jesús a sus discípulos!, pero estos no pudieron seguirlo y mucho menos Enoc y Elías podrían estar  ya en el trono de nuestro Eternal Padre. Al creer esta falsa enseñanza desmerecemos el sacrificio de nuestro Amado Maestro, de pasar por el hades, resucitar y subir al trono de su Padre Dios. ………Paz del Señor .El editor…….